..."de oficios varios, vidas y trasfondos..."

Una gran paseo personalmente inmoral, de lo leído.

Sin duda alguna, este compilación de reportajes y narraciones, muestra en su mayoría, explícitamente la calidad y delicadeza de lo obsceno, como también el vouyerismos mental del morbo.

De oficios varios, es la recolección de diferentes reportajes y narrativas, con un solo fin detallado; dar desde una simple denuncia, hasta llevar a los sentidos placenteros de la piel más que del sexo a un clímax desesperante. Muestra de una manera erótica y “obscena” en la mayoría de sus capítulos, la prostitución, la violación y hasta los deseos que la actual sociedad, maneja como “anormales”.

Para mi gusto, es una manera muy amena y morbosa de presentar loas diferentes situaciones que se manejan a lo largo del libro; provocando reacciones, de deseo, asco; tomando en cuenta que el asco no solo genera asco sino al expulsarlo da placer, ira, desenfreno y deseo por que el texto sea más explícito; excelente forma de mantener alerta al lector.

En, el primer apartado; reportajes en su mayoría, los más trascendentales son: “Martín Encinas, Una preferencia muy definida”, manejando sutilmente el “me vale madres”, expresa su homosexualidad como una vida y no sólo un estilo como muchos estamos acostumbrados a estereotiparlo. Dando a conocer de manera muy general, pero muy explícita su deseo por el hombre y sus consecuencias; claro está no podemos dejar de mencionar el reportaje a “Thalía”, un travesti, que se honra con la aceptación del pueblo, así como considera la afectación social que le ha acarreado su estilo de vida, como al mismo tiempo la felicidad que ha tenido a lo largo de su historia, Thalía se da a conocer no sólo como “el joto” que baila en el Blvd. Luis Encinas.

De ahí diferentes historias como “vestido bajo el catre” y “masajes para hombres”, la primera relatando la cruda realidad de la vida ante su cuerpo y su apariencia; y la segunda del sufrir y la decisión más importante de trabajar cómo prostituta para poder mantener a la familia.

Como esta historia hay varias a lo largo del libro, que marcan el sufrir, la “baquetones”, el sentido de culpabilidad, el maltrato, el gusto y buenas anécdotas que se cuentan.

En el caso de la prostitución, se encuentran narrativas, que llevan al lector a buscar a la mujer y solicitarle sus servicios, pedirle que haga lo que platica con otros clientes; y es que aunque en muchos casos manejan el disgusto de su trabajo, la descriptiva de su labor es muy interesante y obscena. (No se, si es por mi gusto por la mujer, o porque realmente trasmite ese sentimiento). Lo que claro está es que no soy el único en percibir esa sensación de vivir en carne propia las narraciones.

Tal es el caso, de la chica que habla “en otra narración” su asco y compasión en el servico brindado a un anciano, “Bésame la decrepitud”, donde sensualmente describe claramente su labor y compasión, realmente pareciera estar dándose publicidad a ella misma.

En otros aspectos, la homosexualidad se maneja a flor de piel, en este libro, llevando a curiosear los textos de una manera inimaginable; ya que la relación del escrito por un momento puede llegar a ser muy personal, como si sólo estuvieran hablando con un diario y ejemplo más claro que el de “ Se busca hombre sin rostro”, que narra exactamente la situación y desenfreno sexual, en un baño público.

Aunque para muchos de los lectores puede ser algo realmente grotesco e incluso repulsivo, considero que cabe destacar que son escritos artísticos y hay que tomarlos en cuenta como tal y que si algunos piensan la misma situación pero con si heterogéneo, lo mismo suele suceder con lo homogéneo; hago hincapié a que hay que respetar los textos pues ya están dentro de nuestra literatura y disfrutar tanto el morbo, como el erotismo y la obscenidad de sus redactores.

Uno de los fragmentos más interesantes es “Beso de buenas noches”, es increíble manejar desde el coraje y desesperación por no ser escuchado; como leer claramente una violación y la respuesta que al final es placentera a esta. Este joven fuera de hablar de sus traumas psicológicos y sociales, explica cómo su cuerpo reaccionaba positivamente a las caricias producidas por su padrastro, el violador; además de su confusión por el gusto y el disgusto de los momentos después del orgasmo; jura una fiel venganza hacia su madre la que jamás le creyó, explicando que su cuerpo es bello y que busca reconquistar a su violador.

Para finalizar, la historia que más me gustó y llamó la atención de este libro es “Después del miedo no hay nada”, una historia llena de aventuras, esquizofrenia, arte y demás.

Para este apartado vale la pena destacar que el artista habla con el corazón, sin tomar en cuenta la reacción de su mente, simplemente despeja de sus labios lo que siente; y es aquí donde me pregunto ¿eso el locura?, recordemos pues para aquellos lectores de Cohello, lo que narra en su libro “Verónica decide morir” sobre la locura, dando a conclusión con una pequeña parábola dos cosas: una, es loco aquel que no piensa igual que los demás y finge ser alguien que no es; y en segunda, es loco aquel que dice y actúa con lo que realmente piensa.

Un reportaje muy importante considero yo, pues es necesario conocer a estas personas y observar la calidad de artistas que son.

Fuera de todo me atrevo a decir, que me apego fielmente a este pintor, pues de igual manera; yo, he sufrido de depresión desde pequeño, sin saberlo en ese momento claro está, convirtiéndose en estos tiempos en una manía; innumerable veces los deseos de muerte así como el jugar con mi vida, drogas y una parte muy importante considero yo, declarado hace dos años esquizofrénico también.

Es increíble las miles de historias parecidas o muy diferentes que se encuentran allá afuera y que no tomamos en cuenta, “De oficios varios”, como la mayoría de las personas lo conocen en sin duda una de las mejores muestras de que el morbo y la obscenidad, está despierto en todos, y que no podemos pasarlo sencillamente desapercibido.